Se realizará analizando el informe del asesor o asesora y toda la documentación aportada por el candidato.
La evaluación en cada una de las unidades de competencia en las que se haya inscrito el candidato o candidata, tendrá por objeto comprobar si demuestra la competencia profesional requerida en las realizaciones profesionales, en los niveles establecidos en los criterios de realización, que constituyen el referente de evaluación, y en una situación de trabajo, real o simulada, fijada a partir del contexto profesional (VER GLOSARIO).
El plan de evaluación será personalizado a cada persona candidata y para ello se utilizarán los métodos que se consideren necesarios con el fin de comprobar lo explicitado por la persona. Esos métodos pueden ser, entre otros, la observación del candidato o candidata en el puesto de trabajo, simulaciones, pruebas estandarizadas de competencia profesional o entrevista profesional.
Todas las evidencias y actividades desarrolladas deben recopilarse y registrarse.
El resultado de esta fase es: competencia demostrada o no demostrada.
La persona candidata seá informada del resultado y tiene derecho a reclamación ante la Comisión de Evaluación, y en su caso, a interponer recurso de alzada.